Archivo de la categoría: Ben Affleck

[Crítica] Runner, Runner

4/10
Hoy llega a nuestras pantallas la última incursión de Ben Affleck y Justin Timberlake en la gran pantalla. Runner Runner constituye el sueño de todo estafador y delincuente. Una quimera por la que podemos tocar las narices de los grandes magnates ecónomicos siendo unos auténticos don-nadie y salir absolutamente indemnes. Y, por supuesto, llevándonos a la chica como premio en un avión privado que nadie nos ha regalado.
No es que Runner Runner sea una película mala ni desdeñable. Directamente es un telefilm con mucha música discotequera, demasiadas curvas y exceso de billetes verdes. Es una historia cien veces repetida a lo largo de la historia, en la que un joven entra en la organización de un poderoso, playboy y codicioso hombre de “negocios” para trabajar como su mano derecha y le acaba entregando en pro de una justicia que le haga parecer ético y moral.
En Runner Runner nos falta de todo. Desde un buen guión que nos explique de donde viene cada personaje, sus inquietudes, su desarrollo psico-personal, su ascensión al poder y sus contactos. En este tipo de películas, por experiencia, todo aquello que no explique lo que rodea a las mafias, sean del tipo que sean, están condenadas a ser tratadas como mero producto ligero y de consumo rápido, fácilmente olvidable.
Pese a que no vamos a crucificar a los actores, no nos cabe ninguna duda que son papeles que debieron coger para poder financiar proyectos futuros que, en el caso de Ben Affleck, parecen mucho más interesantes desde que conocemos su implicación en la nueva película de David Fincher o el caché que ha retenido como realizador tras conseguir el Oscar por Argo.  
Runner Runner ha sido su primera prueba de fuego en pantalla tras conocerse que encarnaría a Bruce Wayne y su álter ego en la secuela de El Hombre de Acero. Y ya se han generado ciertas expectativas o, por lo menos, la concesión del beneficio de la duda.
Destellos de buen ejercicio de fotografía, composiciones de montaje bastante salvables y una dirección correcta pero sin profundidad es el resultado de una película que arranca bien pero acaba naufragando sin control alguno. La trama queda sostenida únicamente por las tablas de sus tres intérpretes principales los cuales, en alguna contada ocasión, consiguen que nos olvidemos por un momento de mirar el reloj para ver cuánto falta para poder terminar.
Tal y como está la actualidad cinematográfica resulta complicado no animar al público a ir a ver una película. Sin embargo, el bolsillo agradecerá más si vemos Runner Runner en DVD o alquilada mediante los sistemas actuales para poder disfrutar del cine en casa. Créame que la cartelera está cargada de mejores experiencias.

[Crítica] To The Wonder

2/10
A Terrence Malick se le ha ido de las manos. La supuesta pretenciosidad que demostró en El árbol de la vida (lea la crítica en este enlace) le ha llevado a mal acostumbrarse a sí mismo y a crear una obra tan compleja como indiferente que resulta desagradable de ver e incluso de reflexionar. 
Se oían voces que afirmaban que To The Wonder era la evolución espiritual de su película anterior. Sin embargo, lejos queda el querer abarcar toda la historia del universo y del ser humano de la manera tan sublime que fue El árbol de la vida. Acompañado de un reparto de excepción sacrificado vilmente en la sala de montaje, Terrence Malick se ha creído a sí mismo como el sabedor de una nueva técnica cinematográfica que consiste en trabajar sin guión y abarcando tanto que al final no demuestra nada.
Malick estaba mucho mejor posicionado cuando rodaba una película cada década. Cuando esperábamos con ganas su siguiente proyecto y estudiábamos sus modos de rodaje como si fueran algo novedoso. Sin embargo, su ambicioso, su ansia y su pretenciosidad ambulante le han llevado a ganarse más detractores aún de los que obtuvo con su anterior, y por otro lado, excelente trabajo. 
Rachel Weisz, Jessica Chastain y Michael Sheen han sido víctimas de la tijera de su director como en su día lo fueron George Clooney y Sean Penn en sus respectivos proyectos con Malick. La diferencia es que el realizador ya no se anda con chiquitas. Clooney y Penn aparecían escasos minutos en sus cintas. Los tres primeros, ya ni eso. Si nos remitimos al trabajo interpretativo, Olga Kurylenko se lleva el papel protagonista junto con un Ben Affleck en su estilo, un papel donde no tiene que interpretar sino colocarse delante de la cámara y esperar a que el director mueva o no la nerviosa steadycam. Pero, aunque por ahí aparece Rachel McAdams, lo mejor de To The Wonder es un Javier Bardem en un papel nunca visto en él. Interpretando a un sacerdote en plena crisis de fe, sobrecogido por un destino al que no sabe cómo llegar. Buscando las respuestas que un día encontró y de las que ha huido. 
La fotografía de Emmanuel Lubezki siempre es un placer para la vista y es aquí donde radica el mayor éxito de la película, uno de los escasos aspectos técnicos que se salvan de una quema más que merecida. El uso de la cámara, introduciéndose de lleno en los planos, es maravilloso y uno de los terrenos a los que Malick se mantiene fiel. La cámara nos introduce en la situación y en eso hay que ser agradecido con el director. 
Sin embargo, hay muchos defectos en la película. Es imposible no caer en el sueño, en el aburrimiento y en el sopor mientras miramos agradecidos la duración de la película. Afortunadamente, Malick no nos tiene dos horas y media mirando la pantalla practicando una inmerecida pérdida de tiempo. 

[Reportaje] Los grandes olvidados de los Oscars 2013

Cada año resulta de obligado cumplimiento realizar un repaso por todos aquellos nombres propios que, por un motivo u otro, se han quedado fuera de la carrera por los grandes premios del mundo del cine: los Oscars. Las ausencias en este 2013 son notables y la carrera por alzarse por el trono de la Meca hollywoodiense está tomando un cariz impetuoso con algunos y olvidadizo con otros.
Por estas mismas fechas, hablábamos de Ryan Gosling, Steve McQueen, Michael Fassbender, con sus respectivas películas, Drive y Shame. También reclamábamos la presencia de Pedro Almodóvar por la que, sin duda, resulta una de sus películas más sugerentes en la categoría de Mejor Película de Habla No Inglesa, La piel que habito.
Pero este año no pueden faltar aquellos nombres que son sacrificados para dar paso a otros mucho más jóvenes, a veteranos faltos de las necesarias menciones o a inexplicables sucesos de la naturaleza que hacen que, por muchos años que pasen, su presencia en las nominaciones quede más que en entredicho.
En la ceremonia de 2013 podremos acordarnos del mayor error de la temporada de premios del presente año. ¿Alguien se ha preocupado de homenajear al gran y eterno Jean-Louis Trintignant? ¿Alguno ha oído mencionar su sólo nombre en referencia a su papel en la última masterpiece de Michael Haneke? El caso de Trintignant es algo impropio de los grandes premios del cine pero muy propio de la Academia. Olvidar a los grandes y premiar a los irregulares ha sido una constante en los 85 años de existencia de los Oscars. En Amor coinciden dos veteranos actores en plenas facultades pese a su avanzada edad. Sin Trintignant no hay Emmanuelle Riva y sin Riva no hay Jean-Louis Trintignant. El complemento mutuo que se proporcionan durante el metraje y la complejidad psicológica de cada personaje les hacen merecedores de unos premios que este año estarán representados en la figura de la actriz francesa, protagonista de entre otras, Hiroshima Mon Amour. Por tanto, ¿cómo no dedicarle a Trintignant un merecido homenaje por parte de los que creemos que son los más grandes del mundo del cine?
Si seguimos buceando en la categoría de Mejor Actor, hay voces que reclaman una mayor presencia en esta temporada de premios de uno de los actores franceses más versátiles y malditos, al igual que su director fetiche Leos Carax, por uno de los papeles más sugerentes del año. Y es que Denis Lavant realiza en Holy Motors una de las interpretaciones más complicadas, arriesgadas y surrealistas del cine de 2012. La película de Carax, ganadora en el pasado Festival de Sitges a la Mejor Película y presente en el Sevilla Festival de Cine Europeo celebrado en noviembre, ha cosechado un gran éxito, no exento de polémica, al plantearnos una interpretación dentro de siete interpretaciones donde contemplamos el devenir de una vida a través de sus múltiples facetas. Holy Motors es harto pretenciosa aunque no exenta de un estilo inconfundible y digna de mención entre lo más destacado del año.
Saltando de categoría, nos movemos desde Mejor Actor hasta Mejor Director para hacer referencia a tres nombres que han sido arrinconados. Comenzamos por Quentin Tarantino. Y es que el ya casi mítico director se queda fuera de la carrera por el gran premio al mejor realizador por Django desencadenado, una de sus películas más personales y también una de las que más ha extasiado y entusiasmado al gran público. Su personal estilo, para unos basado en el plagio de otras películas y para otros simple homenaje a sus referencias cinéfilas de juventud, es fuente de inspiración para muchos espectadores. La ausencia de Tarantino se produce después de dos nominaciones frustradas por Pulp Fiction y Malditos bastardos.
Sin abandonar la categoría, desde Tarantino nos vamos hasta Kathryn Bigelow. Aquella realizadora antes conocida por su matrimonio con James Cameron ha conseguido hacerse un hueco en el panorama hollywoodiense y colocarse como una de las damas de la dirección consiguiendo además el honor de haber sido la primera mujer ganadora de un Oscar a Mejor Director. De eso hace ya cuatro años, cuando fue galardonada por En tierra hostil. Este año se presentaba con La noche más oscura, una polémica cinta basada en las investigaciones de la CIA sobre la caza y captura de Osama Bin Laden, el terrorista más buscado del planeta. Sin embargo, los académicos nos han privado de la presencia de Bigelow en una de las categorías más insípidas de los últimos años.
Parece ser que el más damnificado por la carrera por los Oscars ha sido un Ben Affleck crecido tras sus últimas victorias en los diferentes sindicatos y que le han aupado, o al menos a su película Argo, como la gran favorita para llevarse el premio a la Mejor Película muy por encima de su más directa contrincante: Lincoln. Y es que siempre se ha dicho que Affleck era mejor director y guionista que actor. Buena prueba de ello es su premio, compartido con Matt Damon, por el libreto de El indomable Will Hunting así como su éxito en sus dos cintas anteriores tras las cámaras, Adiós pequeña, adiós y The Town: Ciudad de ladrones. Sin duda, habrá quien afirme que la presencia de alguno de los tres directores anteriormente mencionados sobra para hacer recaer las miradas en Behn Zeitlin o David O. Russell como nominados inmerecidos y que la carrera a Mejor Director ya se encuentra en las manos de Steven Spielberg, quien la noche del 24 de febrero puede alzar su tercer Oscar como realizador tras La lista de Schindler y Salvar al soldado Ryan.
La categoría de Mejor Actriz de Reparto también se encuentra ya decidida. Anne Hathaway parece no tener rival para ganar su primer Oscar por Los miserables. Su Fantina ha enamorado y embaucado a medio mundo cinéfilo y la ha consagrado como una de las mejores actrices contemporáneas. Además, este año también ha sabido cambiar de registro y salir airosa del rodaje de El Caballero Oscuro: La leyenda renace. Fantina y Catwoman. Dos caras de la misma moneda que pueden poner a Hathaway en el disparadero para continuar una carrera plagada de grandes éxitos.
Muchos otros afirman que el Oscar debe recaer en una veterana actriz que podría también ganar un tercer premio de la Academia. Sally Field y su Mary Lincoln se guardan algún as en la manga por si hay cambios de opinión a última hora. También se han oído voces que reclaman la nominación de Emma Watson por Las ventajas de ser un marginado. En la película, de inminente estreno en España, la joven actriz demuestra su talento más allá de los ya destruidos muros de Hogwarts y se confirma como una de las jóvenes promesas a tener en cuenta.
Ya es sabido que Skyfall ha sido todo un logro dentro de la saga Bond. Sus cinco nominaciones la proclaman como la película de la saga más nominada de la historia. Buena parte de la culpa la tiene un Sam Mendes que ha sintetizado los cincuenta años de trayectoria del agente 007 en una sola película así como escoger una de las canciones de inicio más poderosas de la saga. Adele y su portentosa voz han dotado de personalidad a una de las películas más exitosas y taquilleras de toda la saga Bond. Pero ya hay quien echa de menos en la categoría de Mejor Actor de Reparto a un Javier Bardem que repite corte y tinte de pelo tras No es país para viejos para enfundarse en la piel de Silva, uno de los villanos más sanguinarios que ha conocido 007. Su nominación al BAFTA le atestigua como uno de los papeles más destacados del año aunque quizás no al nivel de una nominación a los Oscars.
Y para finalizar nuestro repaso por los nombres más importantes que han sido olvidados en esta ceremonia de entrega de los Oscars 2013, no podemos dejar pasar la oportunidad de hablar de Leonardo DiCaprio. Su cambio de registro en Django desencadenado le proporcionó la candidatura en los Globos de Oro. Pero los académicos de Hollywood siguen negándole un premio que se le resiste desde ¿A quién ama Gilbert Grape?, El aviador y Diamante de sangre. Su villano en la nueva cinta de Tarantino podría haberle dado por fin la oportunidad de reconciliarse con los Oscars pero lo cierto es que cruzarte con Christoph Waltz en la misma película no es buena señal. El actor alemán sí está nominado y es favorito junto con Tommy Lee Jones (Lincoln) para alzarse con la ansiada estatuilla. Sin embargo, tendremos que esperar para ver a DiCaprio recoger un Oscar. O al menos este es el mensaje que le está mandando la Academia.
El próximo 24 de febrero conoceremos los nombres de los ganadores de esta edición. Grandes títulos se reúnen en el Kodak Theatre de Los Ángeles. Será una ceremonia vibrante. Pocos son los premios que a día de hoy resultan claros favoritos. Este escritor apuesta por Lincoln y por el gran Daniel Day-Lewis como triunfadores de la noche. Pero alguna sorpresa nunca está de más.